"Ya es costumbre de los gobiernos panistas culpar al pasado para ocultar los errores del presente y la falta de visión futura ... en México se requiere un nuevo liderazgo que reencauce el rumbo" menciona en un comunicado el señor Francisco Rojas, coordinador de los diputados del PRI en San Lázaro, en respuesta a las declaraciones realizadas por Felipe Calderón en contra principalmente de los exgobiernos priístas ¡Otra vez Dios mío, pobre partido político perseguido! ¿Cómo es posible que el malvado de Calderón los ataque de esa manera, sobre todo cuando ellos no se lo merecen? ¿Cómo es posible que este Gobierno se empeñe en atacar la honorabilidad de los dinosaurios del PRI? ¿Quién se cree ese Calderón para decir, que literalmente el PRI dejó a México metido en un lodazal? ¿De donde saca argumentos el actual Gobierno panista, para decir que los priístas han gobernado de mano de la delincuencia organizada? ¡Pobrecitos! Lo que pasa es que Calderón no tiene memoria, por lo que vamos a tratar de recordarle algunas cosas:
La gente de los gobiernos del PRI siempre ha pensado en el bienestar del prójimo ¿No me creen? Recordemos por ejemplo el caso del terremoto de septiembre de 1985. Miguel de la Madrid, presidente priísta, recibió toneladas de ayuda internacional para los damnificados, sin embargo gran parte de esa ayuda no llegó a los afectados ¿Por qué? sencillamente porque los damnificados del sismo no eran sus prójimos, los prójimos de Miguel de la Madrid eran su camarilla de ganapanes, quienes se beneficiaron del uso personal que hicieron de la ayuda; a los afectados del sismo solo les construyeron unas viviendas de lámina, parecidas a gallineros, que instalaron sobre los camellones de algunas vialidades, así como en algunos predios baldíos caracterizados por la insalubridad, y en esos refugios temporales, algunos de los afectados pasaron años; después fueron canalizados a unas vecindades que en verdad no necesitaban de otro sismo para caerse solas.
Los gobiernos del PRI siempre se han preocupado por el crecimiento de la economía, para muestra podemos observar el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. A inicios de los 90 Salinas comienza una ola de privatizaciones, para esto Salinas recurrió a una táctica priísta muy recurrente y que se basa en el fomento de la incompetencia dentro de la burocracia y los trabajadores del Estado, para que así, argumentando incapacidad de trabajadores, administradores, etc. se justifique la privatización de los bienes de la Nación; los dos casos mas emblemáticos son los de las minas y Teléfonos de México. En efecto, Carlos Salinas de Gortari se preocupó por el crecimiento de la economía, pero no de la Nación, sino la de sus amigos mas poderosos, y la de él mismo; hoy, Germán Larrea, dueño de las principales minas de México y Carlos Slim, dueño de TELMEX (y por cierto de otras minas) figuran entre los hombres mas ricos y poderosos del mundo, contrastando con el resto de la población mexicana, que literalmente, vive en la mas vil miseria.
Los presidentes del PRI siempre se han preocupado por el ahorro, por ejemplo tenemos a Ernesto Zedillo, quién en su sexenio promovió e implantó el FOBAPROA. En la peor crisis económica de México, iniciada en 1994 y que por cierto fue provocada por el mismo sistema bancario mexicano, el gobierno de Zedillo se propone "salvar el dinero de los ahorradores" que estaba literalmente secuestrado por los bancos; por lo que Zedillo apoyado por el congreso de la unión (de mayoría priísta, pero también apoyados por la bancada panista) decide que lo mas conveniente era pagarle a los bancos y a otras empresas un monto de 9,700,000,000 de dólares; lo mas simpático del asunto, es que esta medida se aprobó supuestamente para salvar el ahorro de los ciudadanos, sin embargo ningún ciudadano vio un centavo de ese dinero; ese dinero fue otorgado a los bancos y empresas mas ricos de México, o sea para ayudar al pobre hay que atascar de dinero al rico, pensaba el ilustre Zedillo; pero la cosa no termina allí, porque esa decisión, la seguimos pagando los mexicanos, y la pagarán nuestros hijos, y nuestros nietos, y nuestros bisnietos, y nuestros etc., etc., o sea, la pagaremos todos menos los beneficiarios de ese saqueo. Definitivamente Zedillo se preocupó por el ahorro, es un hecho que los beneficiarios del FOBAPROA tienen muy buenas cuentas bancarias y mucho dinero que ahorrar (porque es tanto lo robado, que en muchas vidas no se lo podrán acabar).
Después de lo anterior hay que decirle al señor Francisco Rojas, que no se preocupe por lo infames dichos de Calderón en contra de su partido; que no tema al juicio de un presidente que se ha caracterizado mas por lo sanguinario que por lo eficiente; que no le importen las persecuciones de sus dinosaurios mártires; que no le mortifique que Calderón culpe a su querido PRI, que tenga en cuenta que entre ratas de la misma calaña (PRI y PAN) no valen las culpas... mejor que se preocupe, porque mas que los partidos de oposición, culpa mas la historia.
La gente de los gobiernos del PRI siempre ha pensado en el bienestar del prójimo ¿No me creen? Recordemos por ejemplo el caso del terremoto de septiembre de 1985. Miguel de la Madrid, presidente priísta, recibió toneladas de ayuda internacional para los damnificados, sin embargo gran parte de esa ayuda no llegó a los afectados ¿Por qué? sencillamente porque los damnificados del sismo no eran sus prójimos, los prójimos de Miguel de la Madrid eran su camarilla de ganapanes, quienes se beneficiaron del uso personal que hicieron de la ayuda; a los afectados del sismo solo les construyeron unas viviendas de lámina, parecidas a gallineros, que instalaron sobre los camellones de algunas vialidades, así como en algunos predios baldíos caracterizados por la insalubridad, y en esos refugios temporales, algunos de los afectados pasaron años; después fueron canalizados a unas vecindades que en verdad no necesitaban de otro sismo para caerse solas.
Los gobiernos del PRI siempre se han preocupado por el crecimiento de la economía, para muestra podemos observar el sexenio de Carlos Salinas de Gortari. A inicios de los 90 Salinas comienza una ola de privatizaciones, para esto Salinas recurrió a una táctica priísta muy recurrente y que se basa en el fomento de la incompetencia dentro de la burocracia y los trabajadores del Estado, para que así, argumentando incapacidad de trabajadores, administradores, etc. se justifique la privatización de los bienes de la Nación; los dos casos mas emblemáticos son los de las minas y Teléfonos de México. En efecto, Carlos Salinas de Gortari se preocupó por el crecimiento de la economía, pero no de la Nación, sino la de sus amigos mas poderosos, y la de él mismo; hoy, Germán Larrea, dueño de las principales minas de México y Carlos Slim, dueño de TELMEX (y por cierto de otras minas) figuran entre los hombres mas ricos y poderosos del mundo, contrastando con el resto de la población mexicana, que literalmente, vive en la mas vil miseria.
Los presidentes del PRI siempre se han preocupado por el ahorro, por ejemplo tenemos a Ernesto Zedillo, quién en su sexenio promovió e implantó el FOBAPROA. En la peor crisis económica de México, iniciada en 1994 y que por cierto fue provocada por el mismo sistema bancario mexicano, el gobierno de Zedillo se propone "salvar el dinero de los ahorradores" que estaba literalmente secuestrado por los bancos; por lo que Zedillo apoyado por el congreso de la unión (de mayoría priísta, pero también apoyados por la bancada panista) decide que lo mas conveniente era pagarle a los bancos y a otras empresas un monto de 9,700,000,000 de dólares; lo mas simpático del asunto, es que esta medida se aprobó supuestamente para salvar el ahorro de los ciudadanos, sin embargo ningún ciudadano vio un centavo de ese dinero; ese dinero fue otorgado a los bancos y empresas mas ricos de México, o sea para ayudar al pobre hay que atascar de dinero al rico, pensaba el ilustre Zedillo; pero la cosa no termina allí, porque esa decisión, la seguimos pagando los mexicanos, y la pagarán nuestros hijos, y nuestros nietos, y nuestros bisnietos, y nuestros etc., etc., o sea, la pagaremos todos menos los beneficiarios de ese saqueo. Definitivamente Zedillo se preocupó por el ahorro, es un hecho que los beneficiarios del FOBAPROA tienen muy buenas cuentas bancarias y mucho dinero que ahorrar (porque es tanto lo robado, que en muchas vidas no se lo podrán acabar).
Después de lo anterior hay que decirle al señor Francisco Rojas, que no se preocupe por lo infames dichos de Calderón en contra de su partido; que no tema al juicio de un presidente que se ha caracterizado mas por lo sanguinario que por lo eficiente; que no le importen las persecuciones de sus dinosaurios mártires; que no le mortifique que Calderón culpe a su querido PRI, que tenga en cuenta que entre ratas de la misma calaña (PRI y PAN) no valen las culpas... mejor que se preocupe, porque mas que los partidos de oposición, culpa mas la historia.
Apocalipsis 3:16
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