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Porque el derecho de decir lo que pienso y lo que siento me fue dado por los Dioses, no me podrá ser quitado por los hombres, sin que éstos, tarde o temprano, paguen el justo precio.


sábado, 20 de diciembre de 2014

José Antonio Meade y el candil de la calle

Por:  / 18 diciembre, 2014

Ahora si se manchó José Antonio Meade: mira que decir que el caso Ayotzinapa no afectó la imagen de México en el mundo (http://bit.ly/1AjFH18); o sea que ahora no importa que el gobierno esté matando a la población, lo que importa es que nos veamos bonitos en el exterior…
Y es que en un acto de absoluta mezquindad política, el secretario de relaciones exteriores José Antonio Meade, se ufana de los “logros” de México en política exterior, sin embargo parece olvidar u omitir, que en muchos otros países del mundo, las manifestaciones de repudio al caso Ayotzinapa han sido numerosas y vistosas (http://bit.ly/1x6lrN6); como para decir que al mundo le valió un cacahuate lo que pasó en ese lugar del Estado de Guerrero. Con este tipo de dichos y argumentos, el secretario de relaciones exteriores nos deja entrever que lo que le interesa al gobierno de México no son los ciudadanos mexicanos ni los ciudadanos extranjeros indignados por los hechos criminales de Ayotzinapa, sino los grandes inversionistas y saqueadores que están fuertemente interesados en México, pero no en los mexicanos.
Con las declaraciones de Meade se confirma algo que muchos mexicanos estábamos sospechando desde hace un tiempo: el gobierno no trabaja para los mexicanos, al contrario, trabaja contra los mexicanos. Este gobierno peñanietista está muy enfocado en el remate de los bienes de la Nación, precisamente a los extranjeros, con los que tanto le interesa mantener buenos convenios; por lo mismo, con tal de mantener esos convenios está aplicando “reformas estructurales” que a los mexicanos no nos han dejado nada bueno, y que en el futuro, solo dejarán un desastre de miseria y desolación en nuestra tierra.
Por lo anterior podemos entender por qué Meade dice que no afecta el caso Ayotzinapa en el extranjero, simplemente porque a los ricos del mundo no les importa lo que les pase a los indios; sin duda, la imagen que da el gobierno mexicano, dispuesto a matar a su gente para defender los intereses económicos de los extraños, es la mejor que se puede dar al capitalista insaciable y deshumanizado, por lo que asuntos como el de Ayotzinapa representan una excelente garantía, para el millonario local y extranjero, de que en nuestro país sus intereses estarán protegidos a fuego y plomo.
… José Antonio Meade, al igual que todo el gobierno para el que trabaja, tienen la típica conducta del que siempre queda bien con los de afuera, pero que en su casa es un indeseado. Es como el típico mal hijo, que antepone el interés de los “amigos” y los secunda en sus fechorías, muy a pesar del llanto de sus padres y sus hermanos: Meade y el gobierno de México son así, precisamente lo que se conoce como “candil de la calle y obscuridad de la casa”.