“La llamada guerra contra las drogas no está fracasando, sino que sus consecuencias son intencionales”. Noam Chomsky.
En la reunión que se llevó a cabo en la Casa Blanca, el 6 de enero del 2015, el presidente de los estados unidos, Barack Obama, ofrece a Enrique Peña Nieto toda la ayuda de los Estados Unidos para acabar con el “flagelo del narcotráfico”… Dudo que el narco en México sea más flagelo que las imposiciones, en materia económica sobre todo, de nuestros vecinos del norte… Y es que se insiste en culpar al narco de toda la desgracia de una Nación, sin embargo, a pesar de ser una actividad fuera de la ley, su impacto no llegaría a causar las desgracias que causa la mala política económica y social que el gobierno está promoviendo en México. El verdadero flagelo en México, son su cárteles de políticos transas.
Por otro lado, existe información de que en México narco y gobierno operan juntos, por lo menos en el nivel municipal y estatal, y algunos casos muestran que también, a veces, en el nivel federal, véase el caso de la fuga del Chapo en el sexenio de Vicente Fox; a nivel estatal, Humberto Moreira en Coahuila, y el caso de los narcos en las minas de carbón; y a nivel municipal, que más prueba que el caso de José Luis Abarca en Iguala, Guerrero, y la desaparición de los Normalistas de Ayotzinapa. Hemos visto que en los casos de colusión entre narco y gobierno, ambas entidades operan con una eficiencia que cae en lo macabro, hasta el punto que es difícil diferenciar quién es el que planea con más maquiavelismo las acciones; ambos parecen jugar a los policías y ladrones, de tal forma que solo logran confundir a los demás ciudadanos, y luego resulta difícil identificar al verdadero culpable.
Cabe mencionar que el narco no es más que algo inventado muy a conveniencia; y al parecer ahora podemos observar para que fue inventado tal fenómeno. Ahora vemos que el narco es el mejor pretexto para justificar el deliberado mal desempeño del gobierno, y los abusos de éste contra pobladores tranquilos y honorables; ha servido a los Estados Unidos para entrometerse el la política interna de varios países; y en el caso muy específico de México, para desplazar a los pobladores de extensas regiones, que curiosamente ahora serán concesionadas para la extracción de hidrocarburos, minas, y hasta zonas pesqueras.
El narco dejaría de ser el problema que el mismo gobierno ha construido, con la simple reglamentación en el consumo de las drogas, volviendo a los narcos causantes de impuestos y empresarios bien supervisados por el sector salud de México; Esa sería una solución, porque al final, el consumo de drogas sigue existiendo, pero con una reglamentación, seguiría existiendo el consumo, pero sin venir acompañado de tantas muertes y tanta sangre.
… O sea que eso del “flagelo” que quieren acabar los gringos en nuestro País, no es más que un pretexto para seguirse metiendo más y más en nuestro territorio, en defensa de otros intereses muy diferentes a los nuestros…
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